Es cuando ves un titular o una miniatura de video que es súper llamativa y exagerada, diseñada para captar tu atención y hacerte querer hacer clic. Básicamente, te engancha con promesas sensacionales o intrigantes, pero cuando haces clic, el contenido real no siempre cumple con las expectativas.
Es como cuando ves un cartel que dice "¡No vas a creer lo que pasó después!" y te metes a ver, pero al final no era tan sorprendente como esperabas. La idea es atraer tráfico, a veces de manera un poco engañosa.
Detalles adicionales sobre el clickbait:
Títulos Exagerados: Los títulos suelen ser extremadamente dramáticos o misteriosos. Por ejemplo, "¡Este truco cambiará tu vida para siempre!" o "Descubre el secreto que nadie te contó".
Miniaturas Sensacionalistas: En plataformas como YouTube, las miniaturas de los videos suelen mostrar imágenes sorprendentes o provocativas que no siempre representan el contenido del video.
Emociones Fuertes: A menudo juega con tus emociones, ya sea curiosidad, miedo, sorpresa o humor. Esto te hace más propenso a hacer clic para satisfacer esa emoción.
Contenido Poco Relevante: Una vez que haces clic, el contenido a menudo es decepcionante o no se relaciona mucho con el titular. Puede haber información irrelevante o repetitiva solo para mantenerte en la página.
Motivaciones Comerciales: El objetivo principal es atraer a muchas personas a un sitio web o video para generar ingresos publicitarios. Cuantos más clics, más dinero pueden ganar los creadores de contenido.
Engañoso: Aunque no siempre es malintencionado, puede ser engañoso. Puede hacerte perder tiempo en contenidos que no valen la pena o que no aportan valor real.
En resumen, es una táctica para captar tu atención y conseguir clics, pero a menudo a costa de la calidad o relevancia del contenido.