Un reciente estudio realizado en Finlandia ha explorado una innovadora alternativa a la terapia de reemplazo hormonal (TRH) en mujeres que han entrado recientemente en la menopausia. Este estudio se centró en la implementación de un programa de ejercicio aeróbico durante seis meses y ha revelado resultados prometedores.
Resultados del Estudio
Las mujeres que participaron en el programa de ejercicio aeróbico mostraron una notable reducción en los síntomas comunes de la menopausia, como los sudores nocturnos, los cambios de estado de ánimo y la irritabilidad, en comparación con aquellas que no realizaron actividad física.
Comentarios de Expertos
Los investigadores sugieren que el ejercicio podría servir como una alternativa eficaz a la terapia de reemplazo hormonal para aliviar los síntomas de la menopausia. La doctora Steriani Elavsky, de la Penn State University, aunque no participó en el estudio, recomienda la actividad física como una de las mejores opciones disponibles para combatir los síntomas del envejecimiento y mejorar la salud general.
Síntomas Comunes de la Menopausia
La mayoría de las mujeres en la postmenopausia y la menopausia experimentan síntomas como sofocos, sudoración nocturna, trastornos del sueño, cefaleas, depresión, irritabilidad, problemas urinarios y sequedad vaginal.
Evidencia Anterior y Nuevos Hallazgos
Aunque no todos los estudios coinciden, investigaciones anteriores ya habían demostrado la utilidad del ejercicio como terapia de reemplazo hormonal. Por ejemplo, el equipo de la doctora Riitta Luoto, del Instituto UKK para la Investigación y Promoción de la Salud en Tampere, Finlandia, había comprobado que el ejercicio ayuda a reducir los sofocos.
En el nuevo estudio, publicado en la revista Menopause, el equipo analizó una amplia gama de síntomas de la menopausia. Un total de 74 mujeres, de entre 45 y 63 años, participaron en una rutina de ejercicio de 50 minutos al día, cuatro días por semana, durante 24 semanas. Un grupo de control de 77 mujeres asistieron a clases sobre salud.
Protocolo del Estudio
La rutina de ejercicio incluía al menos dos sesiones de caminata por semana, y las otras dos podían consistir en caminata, trote, bicicleta, natación, ejercicios aeróbicos u otras actividades. Las participantes reportaron sus síntomas dos veces al día mediante un cuestionario en sus teléfonos celulares.
Motivación y Resultados
Según Luoto, ejercitar cuatro veces por semana requiere motivación. Las mujeres con síntomas estaban lo suficientemente motivadas para cumplir con la rutina física. Después de seis meses, el grupo que realizó ejercicio mostró una reducción significativa en la proporción de mujeres con alteraciones anímicas e irritabilidad, del 20% al 10%. También se observó una disminución en la cantidad de mujeres con sudores nocturnos, del 60% al 50%. En el grupo control, la reducción de los síntomas no fue tan pronunciada.
Limitaciones del Estudio
Los síntomas que no disminuyeron con el ejercicio fueron la depresión, las cefaleas, los trastornos urinarios y la sequedad vaginal. La doctora Elavsky sugiere que el estado de ánimo podría influir en estos resultados y destaca el fuerte y casi inmediato efecto del ejercicio en el estado de ánimo, aunque no descarta un posible efecto fisiológico del ejercicio.
Conclusión
La investigación sugiere que el ejercicio aeróbico puede ser una alternativa eficaz a la terapia de reemplazo hormonal para aliviar ciertos síntomas de la menopausia. Sin embargo, se necesita más investigación para determinar la cantidad mínima de ejercicio necesaria para obtener estos beneficios. Estudios previos también han encontrado beneficios en otros enfoques, como los suplementos de soja, las clases de control mental y las caminatas.
Importancia del Ejercicio Regular
El ejercicio regular no solo ayuda a aliviar los síntomas de la menopausia, sino que también ofrece beneficios generales para la salud, como la mejora de la salud cardiovascular, la fortaleza muscular y la salud mental. Estos beneficios adicionales pueden ser atractivos para las mujeres que buscan mejorar su bienestar general durante la menopausia.
Comparación con otras Terapias
Es útil comparar el ejercicio con otras terapias alternativas a la TRH. Por ejemplo, los suplementos de soja contienen fitoestrógenos que pueden ayudar a reducir los sofocos y otros síntomas menopáusicos. Las clases de control mental, como el yoga y la meditación, también han mostrado ser eficaces para manejar el estrés y la ansiedad asociados con la menopausia.
Personalización del Programa de Ejercicio
No todas las mujeres responderán de la misma manera al ejercicio. Personalizar un programa de ejercicio que se adapte a las capacidades y preferencias individuales puede mejorar la adherencia y la efectividad del tratamiento. Consultar con un profesional de la salud o un entrenador personal puede ser beneficioso para desarrollar un programa adecuado.
Estudios Futuros
La investigación continua en este campo es crucial. Estudios futuros podrían centrarse en identificar los tipos de ejercicio más efectivos, la frecuencia y la intensidad necesarias para obtener los máximos beneficios, así como la combinación del ejercicio con otras terapias alternativas.
Fuente:
Revista Menopause: El estudio mencionado fue publicado en esta revista. Menopause Journal
Instituto UKK para la Investigación y Promoción de la Salud: Investigaciones del equipo de la doctora Riitta Luoto. UKK Institute
Penn State University: Comentarios de la doctora Steriani Elavsky. Penn State University
General benefits of aerobic exercise: Harvard Health Publishing
Alternative therapies for menopause symptoms: Mayo Clinic