Es un tipo de ácido alfa hidroxi (AHA) que se encuentra naturalmente en ciertas plantas, especialmente en la caña de azúcar, la remolacha y algunas frutas cítricas. Sin embargo, en la mayoría de los productos para el cuidado de la piel, se produce mediante síntesis química.
Es altamente soluble en agua y tiene una estructura molecular pequeña, lo que le permite penetrar fácilmente en la piel. Esto lo convierte en un exfoliante químico efectivo y potente. Cuando se aplica sobre la piel, actúa como un agente exfoliante que disuelve las conexiones entre las células muertas de la piel, facilitando su eliminación.
Al eliminar las células muertas, estimula la renovación celular y promueve la regeneración de una nueva capa de piel. Esto ayuda a mejorar la textura, el tono y la apariencia general de la piel, haciendo que se vea más suave, fresca y juvenil.
Además de sus propiedades exfoliantes, también tiene efectos estimulantes sobre la producción de colágeno en la piel. El colágeno es una proteína esencial que proporciona estructura y elasticidad a la piel, y su estimulación contribuye a reducir la aparición de líneas finas y arrugas.
Debido a sus beneficios para el cuidado de la piel, se utiliza ampliamente en productos cosméticos y tratamientos estéticos, como cremas, lociones, sueros, exfoliantes y peelings químicos. Sin embargo, es importante usarlo con precaución y seguir las instrucciones del producto o las recomendaciones de un profesional para evitar irritaciones y efectos secundarios no deseados.
Beneficios para la piel al usar ácido glicólico
Ofrece una variedad de beneficios para la piel cuando se usa adecuadamente y de manera consistente. Algunos de los principales beneficios de usarlo son:
Exfoliación efectiva: Ess un exfoliante químico potente que ayuda a eliminar las células muertas de la piel y las impurezas de los poros. Esto puede mejorar la textura de la piel, dejándola más suave y lisa.
Estimula la renovación celular: Al eliminar las células muertas, estimula la renovación celular, lo que favorece una piel más fresca y juvenil. Esta estimulación también puede ayudar a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas.
Mejora el tono y la claridad de la piel: Puede ayudar a atenuar las manchas oscuras, hiperpigmentación y decoloraciones en la piel, mejorando así el tono y la claridad general.
Tratamiento del acné y los puntos negros: Al destapar los poros y eliminar las células muertas que pueden obstruirlos, puede ser beneficioso para reducir la aparición de acné y puntos negros.
Estimula la producción de colágeno: Puede ayudar a aumentar la producción de colágeno en la piel, lo que contribuye a mantenerla firme, elástica y con una apariencia más juvenil.
Mejora la absorción de otros productos: Al eliminar las barreras de células muertas, permite una mejor penetración de otros productos para el cuidado de la piel, como sueros e hidratantes, maximizando su eficacia.
Tratamiento de la queratosis pilaris: La queratosis pilaris es una afección de la piel caracterizada por pequeñas protuberancias en los brazos y piernas. Puede ayudar a suavizar y reducir estas protuberancias al eliminar el exceso de queratina en los folículos pilosos.
Efecto antioxidante: tiene propiedades antioxidantes, lo que significa que puede ayudar a proteger la piel contra el daño causado por los radicales libres y factores ambientales adversos.
Es importante destacar que, aunque puede brindar muchos beneficios para la piel, su uso debe realizarse con precaución y de acuerdo con las indicaciones del producto y las necesidades individuales de cada persona.
Contraindicaciones del ácido glicólico
Si bien puede ser beneficioso para muchos tipos de piel, también puede tener algunas contraindicaciones y efectos secundarios en ciertos casos. Es esencial tener en cuenta estas contraindicaciones antes de usar productos que lo contengan:
Piel sensible o reactiva: Las personas con piel sensible pueden experimentar irritación, enrojecimiento, picazón o ardor al usarlo. Es recomendable realizar una prueba de parche antes de usar un producto nuevo para verificar la tolerancia de la piel.
Piel dañada o heridas abiertas: No se debe aplicar en áreas de la piel con heridas abiertas, quemaduras, cortes o irritaciones severas.
Uso concurrente de otros tratamientos exfoliantes: Su uso junto con otros productos exfoliantes, como ácido salicílico o retinoides, puede aumentar la irritación de la piel. Siempre es mejor seguir las recomendaciones de un profesional y evitar el uso combinado de múltiples exfoliantes.
Alergia o sensibilidad al ácido glicólico: Algunas personas pueden tener alergias o una sensibilidad particular a él, lo que puede provocar una reacción adversa en la piel.
Embarazo y lactancia: Durante el embarazo y la lactancia, se recomienda tener precaución con el su uso, ya que no hay suficiente evidencia que respalde su seguridad en estas etapas.
Uso excesivo o concentraciones inadecuadas: El uso excesivo de productos lo contenga o el uso de concentraciones inadecuadamente altas pueden aumentar el riesgo de irritación y daño en la piel.
Fotosensibilidad: Puede hacer que la piel sea más sensible al sol, lo que puede aumentar el riesgo de quemaduras solares y daño cutáneo. Siempre se debe usar protector solar de amplio espectro cuando se utilizaa, independientemente de si se va a exponer al sol o no.
Medicamentos y tratamientos específicos: Algunos medicamentos o tratamientos para la piel pueden interactuar con el ácido glicólico, por lo que es recomendable consultar con un profesional de la salud o un dermatólogo si estás utilizando otros productos o medicamentos para tratar problemas cutáneos.
En caso de duda o si tienes una afección cutánea preexistente, siempre es mejor buscar el asesoramiento de un dermatólogo antes de incorporarlo en tu rutina de cuidado de la piel. Recuerda que cada persona tiene una piel única y lo que funciona para una persona puede no ser adecuado para otra.
Cuidados al usar ácido glicólico
Al usar productos que lo ocntengan, es importante seguir ciertos cuidados para obtener los mejores resultados y minimizar cualquier riesgo de irritación o efectos secundarios no deseados. Aquí hay algunas pautas y cuidados a tener en cuenta al utilizarlo:
Realiza una prueba de parche: Antes de aplicarlo en toda la cara o en grandes áreas del cuerpo, realiza una prueba de parche en una pequeña área de la piel. Aplica una pequeña cantidad del producto en la parte interna del antebrazo y espera al menos 24 horas para ver si hay alguna reacción adversa, como enrojecimiento, picazón o irritación. Si se produce alguna reacción, evita el uso del producto.
Comienza con una concentración baja: Si eres nuevo en su uso, comienza con productos que contengan concentraciones bajas, generalmente alrededor del 5-10%. A medida que tu piel se acostumbre y toleres bien el producto, puedes considerar aumentar gradualmente la concentración si es necesario.
No lo uses todos los días: Dependiendo de la concentración del ácido glicólico y la sensibilidad de tu piel, es posible que no sea adecuado usarlo todos los días. Para muchos, una frecuencia de uso de 2 a 3 veces por semana puede ser suficiente para obtener resultados sin irritar demasiado la piel.
Sigue las instrucciones del producto: Siempre lee y sigue las instrucciones del producto específico que estás utilizando. Las indicaciones pueden variar según la marca y la formulación.
Evita el contorno de ojos y labios: El área alrededor de los ojos y los labios es más delicada y sensible, por lo que se debe evitar aplicar productos que lo contengan en estas zonas.
No lo combines con otros exfoliantes: Evita usar múltiples productos exfoliantes a la vez, como ácido salicílico o retinoides, ya que esto puede aumentar el riesgo de irritación.
Usa protector solar: Su uso puede hacer que la piel sea más sensible al sol, por lo que es fundamental usar protector solar diariamente, incluso en días nublados o cuando no esperas una exposición prolongada al sol.
Hidratación: Después de usarlo, aplica una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel para mantenerla bien hidratada y minimizar la posible sequedad.
Evita el uso con piel irritada o lesionada: No lo utilices si tienes la piel irritada, quemada por el sol o con heridas abiertas.
Consulta a un profesional: Si tienes alguna preocupación sobre cómo usarlo o si tienes afecciones cutáneas específicas, es recomendable consultar a un dermatólogo antes de comenzar cualquier tratamiento.
Siguiendo estos cuidados y precauciones, puedes obtener sus beneficios de manera segura y efectiva para mejorar la apariencia y la salud de tu piel.